Puedes disfrutar recordando esas lecturas o buscando el libro que te falta por leer, cualquier excusa es buena para hacerlo.
Pero si no eres aficionado (yo no soy muy aficionada a las listas y tal vez sea por lo fácil que es comparar cosas con ellas, por ejemplo que sólo haya cuatro nombres de lengua española en ella, o que la preponderancia de la cultura anglosajona sea tan apabullante en este tipo de listas) también te recomiendo que la leas, da pie a muchas reflexiones.